Una patología muy frecuente en nuestra sociedad.
La ruptura o tendinitis de este tendón tras una caída o traumatismo es comprensible. Sin embargo, en muchas ocasiones la patología aparece sin traumatismo previo. La razón se encuentra en una malposición mantenida en el tiempo de la articulación glenohumeral, que o bien comprime excesivamente el tendón supraespinoso, o bien, lo mantiene demasiado estirado.
El tendón agredido puede responder inflamándose, generando calcificaciones o, incluso, puede llegar a romperse de forma espontánea. Es necesario entender que este músculo siempre es víctima de otra desestructuración del buen posicionamiento corporal y, por tanto, tratar su sintomatología directamente no vaya ser efectivo.
Es necesario hacer un análisis completo de la postura del paciente para dar con un diagnóstico preciso que nos explique cuál es el mecanismo desestructurante que ha generado la tendinitis y poder dirigir así el tratamiento a la causa y obtener óptimo resultado.
En Fisioterapia y Movimiento: Sane Pilates, realizamos una valoración biomecánica según el método de cadenas musculares GDS que nos da la pauta para abordar el problema desde la causa, con las técnicas necesarias en cada caso de cadenas musculares.